EL ESPIRITU DEL TIEMPO

Servicios educativos personalizados, en comunidad abierta

Encontrar una aguja en un mundo visual

|

Búsqueda visual s. XXI

Sagrario Espinosa Reyes
Coi-fundadora de ZEITGEISTprogram
https://www.linkedin.com/in/sagrario-espinosa-09976866/

  1. Una generación que vive en imágenes
  2. Como esta generación se enfrenta a la investigación documental
  3. Cómo podemos ayudar desde la educación
La generación zeta depende mucho de las imágenes en su búsqueda de información en Internet

Ing. Sagrario G. Espinosa Reyes
Líder educativa en Z
EITGEISTprogram
octubre 2022

A finales de los 90´s, Giovani Sartori afirmaba que el creciente uso de la imagen como medio de comunicación, desencadenaría en el “empobrecimiento de la capacidad de entender”, ya que la imagen, decía él, “atrofia nuestra capacidad de abstracción” (Sartori, 1997). En ese entonces leíamos con cierto escepticismo sus palabras en su libro Homo Videns. Ahora a 25 años de su crítica no podemos sino darle la razón y preguntarnos por qué no hicimos algunas cosas de forma distinta y qué sí podemos hacer hoy ante esta situación.

Del Homo Videns al Homo Intelligit Cum Viderit

En pleno siglo XXI, podemos afirmar que los niños y adolescentes pertenecen a una generación primordialmente visual. Su forma de relacionarse con el mundo, la forma en que se comunican, incluso la forma en que creen aprender, está siempre mediada por la imagen y muchas veces sustituída por ésta.

Podemos hablar de muchos de los efectos que conlleva esta característica en el ámbito educativo, sin duda podríamos escribir una tesis doctoral al respecto. Pero prefiero, por esta vez, centrarme en cómo se ha transformado un aspecto fundamental del proceso de aprendizaje: la búsqueda y selección de información. También quiero esbozar algunas ideas sobre cómo podemos aprovechar este cambio para compensar los efectos nocivos de este modo particular de acercarse al mundo.

Dominar la habilidad de búsqueda y selección de información implica un conjunto de saberes, que al menos en teoría, se desarrollan a partir de que cada chico comienza a leer. Entre las más importantes están:  lectura de comprensión, análisis de fuentes, de contexto, de audiencia, relevancia y actualidad de la información, además de habilidades en el manejo de motores de búsqueda de diferentes tipos. Cabe mencionar también que para determinadas áreas de estudio es necesario también el dominio del inglés y en muchas ocasiones las raíces grecolatinas de las palabras.

Es una tarea compleja y fundamental para el proceso de aprendizaje, para lograr el aprendizaje a lo largo de la vida, para conseguir la autonomía, autorregulación y autodominio tan deseados y demandados en un mundo como el d hoy. Por otro lado, que los chicos desarrollen el dominio de estas competencias hace posible que puedan tener una participación más protagónica en su proceso educativo y qué tengan la posibilidad de desarrollar más su pensamiento crítico.

Ahora bien, ¿Estamos logrando el dominio de esta competencia en los procesos educativos vigentes? Mi respuesta provisional es no.  Y no estamos poniendo los medios para hacerlo. Sí hay muchos intentos y esfuerzos, en su mayor parte individuales o de pequeños proyectos educativos, como en el que colaboro, que buscan dar con el santo grial de la investigación documental con los niños y adolescentes.

Tras el Santo Grial

En esta búsqueda como tutora de adolescentes dentro de un modelo educativo más horizontal y centrado en el estudiante, me ha quedado claro que como acompañante de los chicos, muchas veces esperamos que los ellos comprendan qué esperamos de su trabajo sin más mediación que nuestra instrucción, que generalmente es dada usando solo las categorías y códigos con los que nosotros aprendimos. En otras palabras, aún interactuamos con ellos como si ambos habláramos el mismo lenguaje y no hay nada más lejano que la realidad. Por ello me parece escencial que ambas partes, tutores y aprendices, recorramos el camino necesario para lograr el encuentro, ésto implica aprender también nosotros sobre sus categorías y códigos, para poderles invitar a conocer los nuestros.

Con lo anterior en mente, me di a la tarea de observar y aprender cómo los chicos hacen sus búsquedas, cómo seleccionan la información a tomar y cómo la presentan. El viaje no podría haber sido más interesante y revelador. Enlisto a continuación los hallazgos más relevantes de este ejercicio que, se ha extendido ya por al menos tres años y que en cada generación de estudiantes va mostrando también cambios o ajustes muy relacionados con los avances tecnológicos en los motores de búsqueda.

En cuanto a búsqueda:

  • Usan pocas palabras clave, tomadas en su mayoría de la instrucción dada, o en su defecto, usan íntegra la frase de lo que quieren encontrar
  • Las búsquedas se hacen solo en español, a pesar de que muchos de ellos son funcionalmente bilingües
  • Ante los resultados arrojados por la búsqueda, suelen emprender una de las dos siguientes acciones:
    • Utilizar como única fuente, las respuestas rápidas que actualmente ofrecen los algoritmos de búsqueda
    • Restringir la búsqueda a imágenes, buscando por “simple vista” la imagen que consideran adecuada para lo que desean obtener
  • Tienden a quedarse con los tres primeros resultados de la búsqueda

En cuanto a selección:

(discriminación de la información)

  • En general, no revisan la fuente de información que están tomando como válida. En el mejor de los casos y a petición expresa de los educadores, toman los datos de la fuente para adjuntarlos en el formato que se les pida
  • En los casos donde utilizan las respuestas rápidas, dificilmente eligen ir a la fuente directa, se limitan a tomar la respuesta tal y como aparece en el buscador, algunos incluso sin leer la respuesta con detenimiento, menos aún considerar el contexto de la respuesta hallada
  • Cuando el buscador no les ofrece respuestas rápidas o éstas, no son convincentes, ellos optan por hacer búsqueda por imágenes. Aquí el proceso de discriminación se basa en aquellas que son visualmente más atractivas, y también consideran cuál de estas imágenes ofrece la mayor información en pocas palabras. Tampoco acceden regularmente a la fuente de la imagen, ni hacen el ejercicio de revisar contexto o pertinencia y actualidad de la información hallada
  • Otra práctica en desuso es contrastar la información entre varias fuentes, la mayoría de los chicos solo buscan dar con una respuesta que les resuelva, al menos de forma provisional, cumplir con lo solicitado

En cuanto al manejo tecnológico:

  • Niños y adolescentes se conducen,  en este terreno, cada vez más en dependencia de la Inteligencia Artificial, para corrección ortográfica, citado, traducción y por supuesto para seleccionarles lo que deben reportar
  • Desaprovechan las herramientas avanzadas de búsqueda y no conocen las nuevas herramientas de análisis de textos
  • Los dispositivos electrónicos como teléfono, tableta y computadora los conciben como un medio de entretenimiento y en lo académico, los utilizan como un medio para invertir lo menos posible en el trabajo y poder seguir utilizandolos para pasar un buen momento
  • Al tiempo que hacen su investigación bibliográfica, tienen abiertas un sinnúmero de ventanas y están expuestos a diversos estímulos generados en la misma máquina: música, notificaciones de redes sociales, chats con amigos, etc.

Las observaciones anteriores me permitieron entender por qué muchas veces los resultados que logran se quedan cortos en cuanto al alcance pedido, principalmente en dos aspectos: 1) Congruencia de la información con el contexto de aplicación y 2) Pertinencia para el nivel y lenguaje de los aprendices. Además, es muy evidente la dificultad de comprensión de lo investigado al pedirles que aterricen la información a una situación específica o que lo transfieran a otros entornos de aprendizaje.

También se comprende bien, a partir de lo observado, que las fuentes de información utilizadas no sean las más adecuadas para el fin que se persigue con una actividad de aprendizaje específico. Aún cuando se les pida reportar las referencias con algún deteerminado protocolo, presentan dificultades para establecer la vigencia y credenciales de dicha fuente.

Finalmente, otro aspecto relevante a considerar de acuerdo a lo observado, es el tiempo que les toma recabar la información, en gran medida debido a los siguientes factores: 1) Distracción originadas en el equipo mismo, 2) Uso superficial de los motores de búsqueda y herramientas digitales y 3) Dificultad para la lectura de comprensión, la mayoría está tan acostumbrados a la imagen que las palabras carecen de sentido para ellos si no vienen mediados por éstas.

Esbozos de un horizonte posible

Ante este panorama y considerando que esa es la forma actual en que los niños y adolescentes se relacionan con este tema, algunas estrategias que estamos emprendiendo con ellos para recorrer nuestra parte del camino y ayudarles a recorrer el suyo son las siguientes:

  1. Entrar con la suya para salir con la nuestra: Mostrarles cómo hacer una búsqueda a partir de sus “atajos”, es decir, partir de las respuestas automáticas o de las búsquedas por imagen para, a través de navegación hipertextual, llevarlos a fuentes más adecuadas a lo que están buscando
  2. Rallys de búsquedas específicas, a partir de un taller breve de alguna de las herramientas de búsqueda y selección más efectivas
  3. Plantear actividades de búsqueda y selección de información que requieran la interpretación o la transferencia de lo hallado a contextos específicos y con significado para ellos
  4. Trabajar estrategias de lectura rápida de textos, con el fin de discriminar si cumplen con lo que específicamente están buscando

Seguramente habrá muchas estrategias que se puedan intentar para mejorar las habilidades de investigación bibliográfica de nuestros alumnos y nuestros hijos, y es bastante probable que no todo lo que intentemos funcione o funcione siempre, pero desde mi perspectiva, siempre será mejor equivocarse intentando, que no hacer nada por no equivocarse.


Contacto con ZEITGEISTprogram

Puedes contactar con Sagrario Epinosa, y con la Aldea Educativa ZEITGEISTprogram
al correo educacionsinfronteras@zeitgeistprogram.org
Encuentra más información de nuestro método finlandés de aprendizaje por proyectos en nuestra página informativa
Copyright Creative commons, atribución.

Verified by MonsterInsights